21 de julio de 2010

LA REFORMA UNIVERSITARIA IDEOLOGÍA Y REIVINDICACIONES


El proceso de la agitación universitaria en la Argentina, el Uruguay, Chile, Perú, etc., acusa el mismo origen y el mismo impulso. La chispa de la agitación es casi siempre un incidente secundario; pero la fuerza que la populariza y la dirige aparece de ese estado de ánimo, de esa corriente de ideas que se designa -no sin riesgo de equívoco- con el nombre de "nuevo espíritu". Por esto, el afán de la reforma se muestra, con semejantes caracteres, en todas las universidades latinoamericanas. Los estudiantes de toda la América Latina, aunque movidos a la lucha por protestas peculiares de su propia vida, parecen hablar el mismo lenguaje.
Asimismo, este movimiento se muestra profundamente conectado con la recia marejada posbélica. Las esperanzas mesiánicas, los sentimientos revolucionarios, las pasiones místicas propias de la posguerra, repercutían particularmente en la juventud universitaria de Latinoamérica. El concepto difuso y urgente de que el mundo entraba en un ciclo nuevo, movía en los jóvenes la ambición de cometer una función heroica y de realizar una obra histórica. Y, como es natural, en la constatación de todos los vicios y fallas del régimen económico social vigente.
La ideología del movimiento estudiantil careció, al principio, de homogeneidad y autonomía.
Solamente a través de la colaboración cada día más estrecha con los sindicatos obreros, de la experiencia del combate contra las fuerzas conserva-doras y de la crítica concreta de los intereses y principios en que se apoya el orden establecido, podían alcanzar las vanguardias universitarias una definida orientación ideológica.
Este es el concepto de los más autorizados portavoces de la nueva generación estudiantil, al juzgar los orígenes y las consecuencias de la lucha por la Reforma.
En todo caso, es un hecho uniformemente observada la formación, al calor de la Reforma, de focos de estudiantes que, en estrecha solidaridad con el proletariado, se han entregado a la transmisión de avanzadas ideas sociales y al estudio de las teorías marxistas.
Fruto de esta rápida revisión que como postulados cardinales de la Reforma Universitaria puede considerarse: primero, la intervención de los alumnos en el gobierno de las universidades y segundo, el funcionamiento de cátedras libres, al lado de las oficiales, con iguales derechos, a cargo de enseñantes de acreditada capacidad en la materia.
Finalmente se diría que el sentido y el origen de estas dos reivindicaciones nos ayudan a esclarecer la significación de la Reforma.

PEDAGOGÍA DEL OPRIMIDO




Paulo Freire

CAPÍTULO I:
El autor mantiene una pedagogía en la que la persona aprenda a cultivarse por medio de situaciones de la vida cotidiana que él vive.
No se habla de una pedagogía para el oprimido, al contrario, según él; la persona debe construir su realidad a través de las circunstancias que pasan diariamente.
El método de aprendizaje de Paulo Freire no es meramente de reproducir las palabras ya existentes, sino que éstas se crean y le permiten hacer conciencia de la realidad para luchar por su emancipación.
La persona que reflexiona se va formando a sí mismo en su interior y crea su conciencia de lucha por transformar la realidad y liberarse de la opresión que lo ha insertado la pedagogía que usualmente hemos considerado, de igual manera, cuando se adquiere una forma nueva de pensar, su concepción del status social que guarda contribuye a variarlo.
La idea de Freire implica dos momentos disímiles de manera sucesiva: la primera se refiere a tomar conciencia de la realidad que la persona vive, como ser oprimido sujeto a las determinaciones que los opresores imponen; la segunda, es la iniciativa de los oprimidos para luchar y liberarse frente a los opresores.
En las relaciones que se establecen, lo oprimidos surgen como los generadores de la violencia, aun cuando su condición y después de los momentos que anteriormente se contaron lo inciten a modificar su status, no obstante, ante los ojos de los opresores, esa lucha se exalta como violencia innecesaria, sueños utópicos y no como las ideas de un revolucionario el cual se reconoce por el compromiso ideológico que establece con sus iguales y no por las acciones que ejecuta.
Por otra parte, lo opresores culpan a sus adversarios de ser unos viciosos, desobligados, irresponsables y culpables de su propia situación, por el contrario se debe a que se encuentran oprimidos y ello los lleva a tal situación cuya causa principal es la explotación de que son objeto.

CAPÍTULO II:
Una característica presente de la educación es la narración y memorización excesiva que se enseñan en las aulas, pero no se estudia la esencia de ello.
La concepción bancaria de la educación pretende convertir la mente de las personas para que se adecuen mejor a los escenarios reales y así poder dominarlos con mayor disposición.
Cuando la persona no lucha por sus intereses y su independencia cultural y social, parece como si hubiera perdido el amor por la vida, tal necrofilia es la situación que ha predominado en varias veces con la educación que se imparte en las escuelas.
La educación liberadora en la persona tiene que ser un acto cognitivo en el que se alcance y analice el contenido, superando la división existente entre el maestro y el alumno; dejar de lado la relación unidireccional para que la bidireccionalidad contribuya a la educación integral de ambos.

CAPÍTULO III:
La realidad actual que rodea al hombre no le permite entenderla ni transformarla porque la educación es simplemente para adaptarlo, sin embargo la idea es que pueda aplicar la segunda categoría.
Para obtener tal objetivo es necesaria la dialogicidad que se establezca entre el maestro y alumno, puesto que el hombre no se hace en el silencio.
El diálogo que se crea entre dos personas contribuye a aumentar el amor mutuo, asimismo, no puede ser semejante con la cobardía.
Ciertas personas que afirman ser líderes, acuden a las masas para crear diálogos con ellos, sin embargo no manifiestan los intereses del pueblo sino los suyos.
Es primordial crear diálogo con el pueblo, pero ello implica utilizar un lenguaje similar al de las costumbres de la persona para que exista esta interacción es necesario integrarse a la vida del hombre, investigar su lenguaje, su actividad y pensamiento.
Cuando se quiera investigar el tema generador, debemos acudir hasta el lugar donde se hallan las personas que intentamos liberar e investigar el pensamiento de ellos para no descontextualizar su trabajo.
La investigación del tema generador envuelve dos etapas distintas en las que se involucra el individuo: la primera se refiere a asistir hasta el lugar de los hechos para estar al tanto cuál es la forma de pensar de los oprimidos y la segunda es aplicar el pensamiento en el aprendizaje ordenado a través de la interacción grupal entre las mismas personas.

CAPÍTULO IV:
El opresor hace uso de la antidialogicidad para mantener su status quo a través de diversos medios, por ello, es importante conquistar a los oprimidos con el diálogo concreto repetidamente, convirtiéndose este acto en una acción necrofilia
Por otra parte, los opresores buscan evitar la unión dialógica con el mismo objetivo anteriormente expuesto, en sus discursos implícitos advierten lo peligroso que podría ser mantener la "paz social" cuando a los oprimidos se les habla de los conceptos de unión, organización, entre otros
Otra característica de la antidialogicidad es la manipulación que a través de la ideología busca conformar a las personas en base a sus objetivos propuestos.
Algunos líderes de izquierda acuden a las masas populares para exponer sus ideas, sin embargo la mayoría de las veces su lucha se centra en lograr el poder.
Otra característica de la antidialogicidad es la invasión cultural de que son objeto los oprimidos; éstos son sólo eso, objetos, mientras que los opresores son autores y actores del proceso; es una táctica subliminal que se emplea para la dominación y que conduce a la inautenticidad de los individuos.
Cuando hay la invasión cultural, las relaciones padre - hijo se modifican para beneficio de los opresores quienes suponen que deben educar al pueblo, por el contrario éste debe educarse en comunión.
Contrastándose a lo que se expuso anteriormente, aparece la colaboración como una forma de emancipación del pueblo, pero ésta no implica la existencia de un líder mesiánico, sino a través de la comunión entre él y las masas quienes interactúan y se comunican con el compromiso mutuo de luchar por la liberación.
Además de colaboración, se requiere de unión para realizar un esfuerzo común que conduzca a la liberación, lo cual implica una forma de acción cultural que enseñe el qué y cómo de la adherencia a la causa revolucionaria.
Aparte de de la unión, la acción dialógica requiere de la organización para evitar el dirigismo ideológico, por el contrario, es un elemento constitutivo de la acción revolucionaria, misma que implica conexión entre la acción y la práctica, audacia, radicalizar, pero no sectarizar y valentía de amar, todas estas acciones deben ser claras sin caer en la ingenuidad.

19 de julio de 2010

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA

DICCIONARIO PANHISPÁNICO DE DUDAS - Primera edición (octubre 2005)

Mayúsculas. La escritura normal utiliza habitualmente las letras minúsculas, si bien, por distintos motivos, pueden escribirse enteramente con mayúsculas palabras, frases e incluso textos enteros (→ 2); pero lo usual es que las mayúsculas se utilicen solo en posición inicial de palabra, y su aparición está condicionada por distintos factores (→ 3 y 4).
1. Cuestiones formales generales
1.1. El empleo de la mayúscula no exime de poner la tilde cuando así lo exijan las reglas de acentuación (→ tilde2, 7): ÁFRICA, África. Únicamente las siglas, que se escriben enteramente en mayúsculas, no llevan nunca tilde: CIA (del ingl. Central Intelligence Agency), y no CÍA.
1.2. Cuando los dígrafos ch, gu, ll y qu se emplean en mayúscula al inicio de una palabra escrita con minúsculas, solo adopta forma de mayúscula el primero de sus componentes: Chillida, Guinea, Llerena, Quevedo; pero si los dígrafos forman parte de una palabra escrita enteramente en mayúsculas, deben ir en mayúscula sus dos componentes: CHILLIDA, GUINEA, LLERENA, QUEVEDO. Cuando los dígrafos forman parte de una sigla, se escribe en mayúscula solo el primero de sus componentes (→ sigla, 5c): PCCh (Partido Comunista de China).
1.3. La forma mayúscula de las letras i y j carece del punto que llevan en su grafía minúscula: Inés, Javier.
2. Uso de mayúsculas en palabras o frases enteras
2.1. Se escriben enteramente en mayúscula las siglas y algunos acrónimos: ISBN, OTI, ONG. Se escriben en minúscula, en cambio, los acrónimos que el uso ha convertido en sustantivos comunes: láser, radar, uvi. Cuando los acrónimos son nombres propios y tienen más de cuatro letras, solo se escribe en mayúscula la inicial: Unicef, Unesco. (→ sigla, 5b).
2.2. Se utiliza la escritura en mayúsculas con el fin de destacar determinadas frases o palabras dentro de un escrito. Así, suelen escribirse enteramente en mayúsculas:
a) Las palabras o frases que aparecen en las cubiertas y portadas de los libros impresos, así como los títulos de cada una de sus divisiones internas (partes, capítulos, escenas, etc.).
b) Las cabeceras de diarios y revistas: EL UNIVERSAL, LA NACIÓN, TIEMPO.
c) Las inscripciones en lápidas y monumentos.
d) En textos jurídicos y administrativos —decretos, sentencias, bandos, edictos, certificados o instancias—, el verbo o verbos que presentan el objetivo fundamental del documento: CERTIFICA, EXPONE, SOLICITA.
e) En textos de carácter informativo, las frases que expresan el contenido fundamental del escrito: Por orden expresa de la dirección, se comunica a todos los empleados que, a partir de ahora, ESTÁ PROHIBIDO FUMAR DENTRO DE LAS DEPENDENCIAS DE LA EMPRESA.
f) Los textos de los carteles de aviso, para asegurar su visibilidad: SE RUEGA NO FUMAR; PROHIBIDO EL PASO.
3. Uso de mayúscula inicial exigido por la puntuación. De acuerdo con la posición que la palabra ocupe en el escrito, la puntuación exige su escritura con mayúscula inicial en los casos siguientes:
3.1. Si se trata de la primera palabra de un escrito o va después de punto: Hoy no iré. Mañana puede que sí.
3.2. Si sigue a los puntos suspensivos, cuando estos cierran un enunciado: Compramos mariscos, solomillos, vino... La cena resultó un éxito. Pero si los puntos suspensivos no cierran el enunciado, sino que este continúa tras ellos, la palabra que los sigue se escribe con inicial minúscula: Estoy pensando que... aceptaré; en esta ocasión debo arriesgarme. (→ puntos suspensivos, 1).
3.3. Después de los dos puntos, debe comenzarse el texto con inicial mayúscula en los casos siguientes (→ dos puntos, 1.3, 1.4 y 1.6):
a) Tras los dos puntos que siguen a la fórmula de encabezamiento o saludo de una carta: Muy señor mío: / Le agradeceré...
b) Tras los dos puntos que siguen al verbo fundamental de un documento jurídico-administrativo: CERTIFICA: / Que D. José Álvarez García ha seguido el Curso de Técnicas Audiovisuales...
c) Tras los dos puntos que anuncian la reproducción de una cita o palabras textuales: Pedro dijo: «No volveré hasta las nueve».
3.4. En frases interrogativas y exclamativas existen dos posibilidades:
3.4.1. Si la pregunta o la exclamación constituyen la totalidad del enunciado, y sus signos de cierre equivalen a un punto, la primera palabra de la pregunta o la exclamación se escribe con inicial mayúscula, así como la palabra que inicia la oración siguiente:
¿En qué año nació tu abuelo? Si no me equivoco, tenía la misma edad que el mío.
¡Qué miedo pasamos ayer! Se nos hizo de noche mientras bajábamos de la montaña.
3.4.2. Si la pregunta o la exclamación constituyen solo una parte del enunciado, pueden darse dos casos:
a) La pregunta o la exclamación inician el enunciado. En este caso, la primera palabra que sigue a los signos de apertura (¿ ¡) se escribe con mayúscula y la que sigue a los signos de cierre (? !) se escribe con minúscula: ¿Qué sorpresas me deparará este día?, me pregunto ante el espejo cada mañana. Esto ocurre también cuando se suceden varias preguntas o exclamaciones breves que pueden ser consideradas un único enunciado y separarse con signos de coma o de punto y coma: ¿Cómo te llamas?, ¿en qué trabajas?, ¿dónde naciste?
b) La pregunta o la exclamación no están colocadas al comienzo del enunciado, sino que siguen a otra palabra o palabras que también forman parte de este. En ese caso, la primera palabra de la pregunta o de la exclamación (la que sigue a los signos de apertura) se escribe con minúscula:
Natalia, ¿puedes ayudarme?
Pero ¡qué alegría tan grande verte por aquí!
3.5. Antes era costumbre, en los poemas, emplear la mayúscula al principio de cada verso, razón por la cual las letras de esta forma tomaron el nombre de «versales» (mayúsculas de imprenta). En la poesía moderna, esta costumbre está en desuso.
4. Uso de mayúscula inicial independientemente de la puntuación. Se escriben con letra inicial mayúscula todos los nombres propios y también los comunes que, en un contexto dado o en virtud de determinados fenómenos (como, por ejemplo, la antonomasia), funcionan con valor de tales, es decir, cuando designan seres o realidades únicas y su función principal es la identificativa. En otras ocasiones, la mayúscula responde a otros factores, como la necesidad de distinguir entre sentidos diversos de una misma palabra (mayúscula diacrítica), o a razones expresivas o de respeto (mayúscula de respeto). Se escriben con inicial mayúscula las palabras siguientes:
4.1. Los nombres propios de persona, animal y cosa singularizada: Beatriz, Platero, Tizona (espada del Cid).
4.2. Los nombres de divinidades: Dios, Jehová, Alá, Afrodita, Júpiter, Amón.
4.3. Los apellidos: Jiménez, García, Mendoza. Si un apellido español comienza por preposición, o por preposición y artículo, estos se escriben con minúscula cuando acompañan al nombre de pila (Juan de Ávalos, Pedro de la Calle); pero si se omite el nombre de pila, la preposición debe escribirse con mayúscula (señor De Ávalos, De la Calle). Si el apellido no lleva preposición, sino solamente artículo, este se escribe siempre con mayúscula, independientemente de que se anteponga o no el nombre de pila (Antonio La Orden, señor La Orden). También se escriben con mayúscula los nombres de las dinastías derivados de un apellido: los Borbones, los Austrias, salvo que se utilicen como adjetivos, caso en el que se escriben con minúscula: los reyes borbones. Por otra parte, deben conservar la mayúscula los apellidos de autores (a veces acompañados también del nombre de pila) cuando designan sus obras: «Incendiaron la iglesia, y con ella las tres joyas pictóricas —un Goya [...], un Bayeu [...] y un José del Castillo» (Laín Descargo [Esp. 1976]).
4.4. Los sobrenombres, apodos y seudónimos: Manuel Benítez, el Cordobés; José Nemesio, alias el Chino; Alfonso X el Sabio; el Libertador; el Greco; el Pobrecito Hablador (seudónimo del escritor Mariano José de Larra). El artículo que antecede a los seudónimos, apodos y sobrenombres, tanto si estos acompañan al nombre propio como si lo sustituyen, debe escribirse con minúscula: Ayer el Cordobés realizó una estupenda faena; por lo tanto, si el artículo va precedido de las preposiciones a o de, forma con ellas las contracciones al (→ al) y del (→ del): Me gusta mucho este cuadro del Greco (no de El Greco); El pueblo llano adoraba al Tempranillo (no a El Tempranillo).
4.5. Los nombres comunes que, por antonomasia, se utilizan para designar a una persona en lugar del nombre propio: el Mantuano (por Virgilio), el Sabio (por Salomón), el Magnánimo (por el rey Alfonso V), así como los que se refieren, también por antonomasia, a Dios, a Jesucristo o a la Virgen: el Creador, el Todopoderoso, el Mesías, el Salvador, la Purísima, la Inmaculada.
4.6. Los nombres abstractos personificados, utilizados alegóricamente: la Muerte, la Esperanza, el Mal.
4.7. Los nombres propios geográficos (continentes, países, ciudades, comarcas, mares, ríos, etc.): América, África, Italia, Canadá, Toledo, Lima, las Alpujarras, la Rioja (comarca), la Mancha (comarca), el Adriático, el Mediterráneo, el Orinoco, el Ebro, los Andes, el Himalaya. Como se ve en los ejemplos, determinados nombres propios geográficos van necesariamente acompañados de artículo, como ocurre con las comarcas, los mares, los ríos y las montañas. En otros casos, como ocurre con determinados países, el uso del artículo es opcional: Perú o el Perú (→ el, 5). El artículo, en todos estos casos, debe escribirse con minúscula, porque no forma parte del nombre propio. Pero cuando el nombre oficial de un país, una comunidad autónoma, una provincia o una ciudad lleve incorporado el artículo, este debe escribirse con mayúscula: El Salvador, La Rioja (comunidad autónoma), Castilla-La Mancha (comunidad autónoma), La Pampa, La Habana, Las Palmas. Cuando el artículo forma parte del nombre propio no se realiza en la escritura la amalgama con las preposiciones de o a: Mi padre acaba de regresar de El Cairo (no del Cairo); Este verano iremos a El Salvador (no al Salvador).
Los nombres comunes genéricos que acompañan a los nombres propios geográficos (ciudad, río, mar, océano, sierra, cordillera, cabo, golfo, estrecho, etc.) deben escribirse con minúscula: la ciudad de Panamá, el río Ebro, la sierra de Gredos, la cordillera de los Andes, el cabo de Hornos. Solo si el nombre genérico forma parte del nombre propio, se escribe con mayúscula inicial: Ciudad Real, Río de la Plata, Sierra Nevada, los Picos de Europa. También se escriben con inicial mayúscula algunos de estos nombres genéricos cuando, por antonomasia, designan un lugar único y, por lo tanto, funcionan a modo de nombre propio. Estas antonomasias están lógicamente limitadas en su uso a la comunidad de hablantes que comparten una misma geografía, para los que la identificación de la referencia es inequívoca, como ocurre, por ejemplo, entre los chilenos, con la Cordillera (por la cordillera de los Andes) o, entre los españoles, con la Península (por el territorio peninsular español) o el Estrecho (por el estrecho de Gibraltar). El hecho de escribir Península Ibérica con mayúsculas se debe a que con esta expresión nos referimos a una entidad de carácter histórico-político, y no a un mero accidente geográfico.
4.8. Las designaciones que, por antonomasia, tienen algunos topónimos y que se usan como alternativa estilística a su nombre oficial: el Nuevo Mundo (por América), la Ciudad Eterna (por Roma).
4.9. Los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de determinadas zonas geográficas, que generalmente abarcan distintos países, pero que se conciben como áreas geopolíticas con características comunes: Occidente, Oriente Medio, Cono Sur, Hispanoamérica, el Magreb.
4.10. Los nombres de vías y espacios urbanos. Al igual que en el caso de los nombres geográficos, solo el nombre propio debe ir escrito con mayúscula, y no los nombres comunes genéricos que acompañan a este, como calle, plaza, avenida, paseo, etc., que deben escribirse con minúscula: calle (de) Alcalá, calle Mayor, plaza de España, avenida de la Ilustración, paseo de Recoletos. Sin embargo, se escribirán en mayúscula los nombres genéricos de vías o espacios urbanos procedentes del inglés: Oxford Street, Quinta Avenida, Central Park, como es usual en esa lengua.
4.11. Los nombres de galaxias, constelaciones, estrellas, planetas y satélites: la Vía Láctea, la Osa Mayor, la Estrella Polar, Venus, Ganimedes. Las palabras Sol y Luna solo suelen escribirse con mayúscula inicial en textos científicos de temática astronómica, en los que designan los respectivos astros: «Entre la esfera de fuego y la de las estrellas fijas están situadas las esferas de los distintos planetas, empezando por la esfera de la Luna y, a continuación, las esferas de Mercurio, Venus, el Sol, Marte, Júpiter y Saturno» (Torroja Sistemas [Esp. 1981]); pero, excepto en este tipo de textos, se escriben normalmente con minúscula: El sol lucía esplendoroso esa mañana; Entra mucho sol por la ventana; Negros nubarrones ocultaron la luna por completo; Me pongo muy nervioso cuando hay luna llena. La palabra tierra se escribe con mayúscula cuando designa el planeta: «Dios le hizo ver las estrellas jamás vistas desde la Tierra» (Fuentes Naranjo [Méx. 1993]); pero con minúscula en el resto de sus acepciones: El avión tomó tierra; Esta tierra es muy fértil; He vuelto a la tierra de mis mayores.
4.12. Los nombres de los signos del Zodiaco: Aries, Géminis, Sagitario; también los nombres alternativos que aluden a la representación iconográfica de cada signo: Balanza (por Libra), Toro (por Tauro), Carnero (por Aries), Gemelos (por Géminis), Cangrejo (por Cáncer), Pez (por Piscis), Escorpión (por Escorpio), León (por Leo), Virgen (por Virgo). Se escriben con minúscula, en cambio, cuando dejan de ser nombres propios por designar, genéricamente, a las personas nacidas bajo cada signo: Raquel es sagitario; Los géminis son muy volubles.
4.13. Los nombres de los cuatro puntos cardinales (Norte, Sur, Este, Oeste) y de los puntos del horizonte (Noroeste, Sudeste, etc.), cuando nos referimos a ellos en su significado primario, como tales puntos, o cuando forman parte de un nombre propio: La brújula señala el Norte; La nave puso rumbo al Noroeste; Corea del Norte; la Cruz del Sur. También se escriben con mayúsculas los casos de Polo Norte y Polo Sur. Sin embargo, cuando los nombres de los puntos cardinales o de los puntos del horizonte están usados en sentidos derivados y se refieren a la orientación o la dirección correspondientes, se escribirán en minúscula: el sur de Europa, el noroeste de la ciudad, el viento norte. También se escribirán en minúscula estos puntos cuando estén usados en aposición: latitud norte, hemisferio sur, rumbo nornoroeste. En el caso de las líneas imaginarias, tanto de la esfera terrestre como celeste, se recomienda el uso de la minúscula: ecuador, eclíptica, trópico de Cáncer.
4.14. Los sustantivos y adjetivos que componen el nombre de entidades, organismos, departamentos o divisiones administrativas, edificios, monumentos, establecimientos públicos, partidos políticos, etc.: el Ministerio de Hacienda, la Casa Rosada, la Biblioteca Nacional, el Museo de Bellas Artes, la Real Academia de la Historia, el Instituto Caro y Cuervo, la Universidad Nacional Autónoma de México, la Facultad de Medicina, el Departamento de Recursos Humanos, el Área de Gestión Administrativa, la Torre de Pisa, el Teatro Real, el Café de los Artistas, el Partido Demócrata. También se escribe con mayúscula el término que en el uso corriente nombra de forma abreviada una determinada institución o edificio: la Nacional (por la Biblioteca Nacional), el Cervantes (por el Instituto Cervantes), la Complutense (por la Universidad Complutense), el Real (por el Teatro Real).
4.15. Los nombres de los libros sagrados y sus designaciones antonomásticas: la Biblia, el Corán, el Avesta, el Talmud, la(s) Sagrada(s) Escritura(s). También los nombres de los libros de la Biblia: Génesis, Levítico, Libro de los Reyes, Hechos de los Apóstoles.
4.16. Los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de publicaciones periódicas o de colecciones: La Vanguardia, Nueva Revista de Filología Hispánica, Biblioteca de Autores Españoles.
4.17. La primera palabra del título de cualquier obra de creación (libros, películas, cuadros, esculturas, piezas musicales, programas de radio o televisión, etc.); el resto de las palabras que lo componen, salvo que se trate de nombres propios, deben escribirse con minúscula: Últimas tardes con Teresa, La vida es sueño, La lección de anatomía, El galo moribundo, Las cuatro estaciones, Las mañanas de la radio, Informe semanal. En el caso de los títulos abreviados con que se conocen comúnmente determinados textos literarios, el artículo que los acompaña debe escribirse con minúscula: el Quijote, el Lazarillo, la Celestina.
4.18. Los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de documentos oficiales, como leyes o decretos, cuando se cita el nombre oficial completo: Real Decreto 125/1983 (pero el citado real decreto), Ley para la Ordenación General del Sistema Educativo (pero la ley de educación, la ley sálica, etc.). También se escriben con mayúscula los nombres de los documentos históricos: Edicto de Nantes, Declaración Universal de los Derechos Humanos.
4.19. Los nombres de festividades religiosas o civiles: Epifanía, Pentecostés, Navidad, Corpus, Día de la Constitución, Año Nuevo, Feria de Abril.
4.20. Las advocaciones de la Virgen: la Virgen de Guadalupe, la Virgen del Rocío. También las celebraciones o festividades a ellas dedicadas: el Rocío, el Pilar.
4.21. Los nombres de órdenes religiosas: el Carmelo, el Temple, la Merced. También se escribe con mayúscula la palabra Orden cuando acompaña al nombre propio: la Orden del Temple.
4.22. Los nombres de marcas comerciales. Las marcas comerciales son nombres propios, de forma que, utilizados específicamente para referirse a un producto de la marca, han de escribirse con mayúscula: Me gusta tanto el Cinzano como el Martini; Me he comprado un Seat; pero cuando estos nombres pasan a referirse no exclusivamente a un objeto de la marca en cuestión, sino a cualquier otro con características similares, se escriben con minúscula: Me aficioné al martini seco en mis años de estudiante (al vermú seco, de cualquier marca).
4.23. Las palabras que forman parte de la denominación oficial de premios, distinciones, certámenes y grandes acontecimientos culturales o deportivos: el Premio Cervantes, los Goya, la Gran Cruz de la Orden de Alfonso X el Sabio, la Bienal de Venecia, la Feria del Libro, los Juegos Olímpicos. Por lo que respecta a los premios, cuando nos referimos al objeto material que los representa o a la persona que los ha recibido, se utiliza la minúscula: Esa actriz ya tiene dos goyas; Ha colocado el óscar encima del televisor; Esta noche entrevistan al nobel de literatura de este año.
4.24. Los sustantivos y adjetivos que forman el nombre de disciplinas científicas, cuando nos referimos a ellas como materias de estudio, y especialmente en contextos académicos (nombres de asignaturas, cátedras, facultades, etc.) o curriculares: Soy licenciado en Biología; Me he matriculado en Arquitectura; El profesor de Cálculo Numérico es extraordinario. Fuera de los contextos antes señalados, se utiliza la minúscula: La medicina ha experimentado grandes avances en los últimos años; La psicología de los niños es muy complicada. Los nombres de asignaturas que no constituyen la denominación de una disciplina científica reciben el mismo tratamiento que si se tratase del título de un libro o de una conferencia, esto es, solo la primera palabra se escribe con mayúscula: Introducción al teatro breve del siglo xvii español, Historia de los sistemas filosóficos. También se escriben con mayúscula los sustantivos y adjetivos que dan nombre a cursos, congresos, seminarios, etc.: 1.er Curso de Crítica Textual, XV Congreso Mundial de Neonatología, Seminario de Industrias de la Lengua.
4.25. La primera palabra del nombre latino de las especies vegetales y animales: Pimpinella anisum, Panthera leo (los nombres científicos latinos deben escribirse, además, en cursiva). Se escriben también con mayúscula los nombres de los grupos taxonómicos zoológicos y botánicos superiores al género, cuando se usan en aposición: orden Roedores, familia Leguminosas; pero estos mismos términos se escriben con minúscula cuando se usan como adjetivos o como nombres comunes: El castor es un mamífero roedor; Hemos tenido una buena cosecha de leguminosas.
4.26. Los nombres de edades y épocas históricas, cómputos cronológicos, acontecimientos históricos y movimientos religiosos, políticos o culturales: la Edad de los Metales, la Antigüedad, la Edad Media, la Hégira, el Cisma de Occidente, la Contrarreforma, la Primera Guerra Mundial, la Revolución de los Claveles, el Renacimiento. Igualmente se escriben con mayúscula los sustantivos que dan nombre a eras y períodos geológicos: Cuaternario, Mioceno, Pleistoceno, Jurásico. El adjetivo especificador que acompaña, en estos casos, a los sustantivos Revolución e Imperio se escribe con minúscula: la Revolución francesa, el Imperio romano.
4.27. Determinados nombres comunes cuando, por antonomasia, designan una sola de las realidades de su misma clase: el Diluvio (referido al diluvio bíblico), la Reconquista (referida a la de los territorios ocupados por los musulmanes, llevada a cabo por los reinos cristianos peninsulares durante la Edad Media), el Muro (referido al que separaba en Berlín los sectores oriental y occidental).
4.28. Determinados nombres, cuando designan entidades o colectividades institucionales: la Universidad, el Estado, el Ejército, el Reino, la Marina, la Judicatura, el Gobierno. En muchos casos, esta mayúscula tiene una función diacrítica o diferenciadora, ya que permite distinguir entre acepciones distintas de una misma palabra: Iglesia (‘institución’) / iglesia (‘edificio’), Ejército (‘institución’) / ejército (‘conjunto de soldados’), Gobierno (‘conjunto de los ministros de un Estado’) / gobierno (‘acción de gobernar’). La mayúscula diacrítica afecta tanto al singular como al plural: «Europa es importante para los Gobiernos, pero sobre todo para los ciudadanos» (País [Esp.] 9.1.97).
4.29. Los nombres de conceptos religiosos como el Paraíso, el Infierno, el Purgatorio, etc., siempre que se usen en su sentido religioso originario, y no en usos derivados o metafóricos, pues, en ese caso, se escriben con minúscula: Aquella isla era un paraíso; La noche pasada fue un infierno.
4.30. En textos religiosos, suelen escribirse con mayúscula, en señal de respeto, los pronombres personales Tú, Ti, Sí, Vos, Él, Ella, referidos a Dios o a la Virgen.
4.31. Los títulos, cargos y nombres de dignidad, como rey, papa, duque, presidente, ministro, etc., que normalmente se escriben con minúscula (→ 6.9), pueden aparecer en determinados casos escritos con mayúscula. Así, es frecuente, aunque no obligatorio, que estas palabras se escriban con mayúscula cuando se emplean referidas a una persona concreta, sin mención expresa de su nombre propio: El Rey inaugurará la nueva biblioteca; El Papa visitará la India en su próximo viaje. Por otra parte, por razones de respeto, los títulos de los miembros de la familia reinante en España suelen escribirse con mayúscula, aunque vayan seguidos del nombre propio de la persona que los posee, al igual que los tratamientos de don y doña a ellos referidos: el Rey Don Juan Carlos, el Príncipe Felipe, la Infanta Doña Cristina. También es costumbre particular de las leyes, decretos y documentos oficiales, por razones de solemnidad, escribir con mayúsculas las palabras de este tipo: el Rey de España, el Jefe del Estado, el Presidente del Gobierno, el Secretario de Estado de Comercio. Por último, es muy frecuente que los cargos de cierta categoría se escriban con mayúscula en el encabezamiento de las cartas dirigidas a las personas que los ocupan.
4.32. En textos de carácter publicitario, propagandístico o similar, es frecuente la aparición de mayúsculas no justificadas desde el punto de vista ortográfico, así como el fenómeno inverso, esto es, la aparición de minúsculas donde las normas prescriben la mayúscula. Estos usos expresivos o estilísticos, cuya finalidad es llamar la atención del receptor para asegurar así la eficacia del mensaje, no deben extenderse, en ningún caso, a otro tipo de escritos.
4.33. También es habitual que en textos pertenecientes a ámbitos particulares se escriban con mayúscula las palabras que designan conceptos de especial relevancia dentro de esos ámbitos. Así, por ejemplo, es normal ver escritos con mayúscula, en textos religiosos, palabras como Sacramento, Bautismo, Misa; o, en textos militares, las palabras Bandera o Patria. Estas mayúsculas, que no deben extenderse a la lengua general, obedecen únicamente a razones expresivas o de respeto.
5. Otros usos de las mayúsculas. Se escriben con mayúsculas los números romanos (→ números, 3), algunas abreviaturas (→ abreviatura, 6b) y algunos símbolos (→ símbolo, 4).
6. Casos en que no debe usarse la mayúscula inicial. Se escriben con minúscula inicial, salvo que la mayúscula venga exigida por la puntuación (→ 3), las palabras siguientes:
6.1. Los nombres de los días de la semana, de los meses y de las estaciones del año: lunes, abril, verano. Solo se escriben con mayúscula cuando forman parte de fechas históricas, festividades o nombres propios: Primero de Mayo, Primavera de Praga, Viernes Santo, Hospital Doce de Octubre.
6.2. Los nombres de las notas musicales: do, re, mi, fa, sol, la, si.
6.3. Los nombres propios que se usan como nombres comunes. Es muy frecuente que determinados nombres propios acaben designando un género o una clase de objetos o personas. Esto ocurre en los casos siguientes:
a) Nombres propios de persona que pasan a designar genéricamente a quienes poseen el rasgo más característico o destacable del original: Mi tía Petra es una auténtica celestina; Siempre vas de quijote por la vida; Mi padre, de joven, era un donjuán.
b) Muchos objetos, aparatos, sistemas y productos que pasan a ser designados con el nombre propio de su inventor, de su descubridor, de su fabricante o de la persona que los popularizó o en honor de la cual se hicieron (zepelín, roentgen, braille, quevedos, rebeca, napoleón), o del lugar en que se producen o del que son originarios (cabrales, rioja, damasco, fez). Por el contrario, conservan la mayúscula inicial los nombres de los autores aplicados a sus obras (→ 4.3).
c) Nombres de marcas comerciales, cuando no designan ya un objeto o un producto de la marca, sino, genéricamente, cualquier objeto o producto de características similares (→ 4.22).
6.4. Los nombres comunes genéricos que acompañan a los nombres propios de lugar, sean geográficos (→ 4.7) o de espacios o vías urbanas (→ 4.10).
6.5. Los nombres de los vientos, salvo que estén personificados en poemas o relatos mitológicos: céfiro, austro, bóreas, tramontana.
6.6. Los nombres de las religiones: catolicismo, budismo, islamismo, judaísmo.
6.7. Los nombres de tribus o pueblos y de lenguas, así como los gentilicios: el pueblo inca, los mayas, el español, los ingleses.
6.8. Los tratamientos (usted, señor, don, fray, san (to), sor, reverendo, etc.), salvo que se escriban en abreviatura, caso en que se escriben con mayúscula: Ud., Sr., D., Fr., Sto., Rvdo. Solo cuando, por tradición, se han formado acuñaciones que funcionan como nombres propios, se escribirán estos tratamientos en mayúscula: Fray Luis, referido a fray Luis de León; Sor Juana, referido a sor Juana Inés de la Cruz; Santa Teresa, referido a santa Teresa de Jesús.
6.9. Los títulos, cargos y nombres de dignidad como rey, papa, duque, presidente, ministro, etc., se escriben con minúscula cuando aparecen acompañados del nombre propio de la persona que los posee, o del lugar o ámbito al que corresponden (el rey Felipe IV, el papa Juan Pablo II, el presidente de Nicaragua, el ministro de Trabajo), o cuando están usados en sentido genérico (El papa, el rey, el duque están sujetos a morir, como lo está cualquier otro hombre). Existen casos, sin embargo, en que estas palabras pueden escribirse con mayúsculas (→ 4.31).

Clases urgentes de ortografía para no confundir la ''s'' con la ''z''

a24 EL COMERCIO DOMINGO 18 DE JULIO DEL 2010

Reportero ciudadano:
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Los horrores ortográficos ya no son novedad en los letreros y avisos de tránsito que abundan en la capital. Pero el error ya linda con la esquizofrenia cuando, estando uno al lado del otro, dos carteles son escritos de manera distinta. Así pues, en el cruce de las avenidas Túpac Amaru y los Jazmines, en el distrito de Independencia, un letrero nos indica la entrada a la Av. Los Jazmines. Pero para e personal que realiza as obras del Metropolitano a estación respectiva se llama Los Jasmines. ¿Qué castellano aprendieron?

LOS SIETE SABERES NECESARIOS PARA LA EDUCACIÓN DEL FUTURO


Por: Edgar Morín

Acontinuación se entenderá mejor cada saber necesario.
1. Una educación que cure la ceguera del conocimiento. Morín afirma que todo conocimiento conlleva al riesgo del error y la ilusión y que la educación del futuro debe contar siempre con esa posibilidad. El conocimiento humano es débil y está expuesto a alucinaciones, a errores de percepción, a perturbaciones, a la influencia de la propia cultura, a la selección simplemente sociológica de nuestras ideas, etc. Puede pensarse por ejemplo, que despojando de afecto todo conocimiento eliminamos el riesgo de error. Es cierto que el odio, la amistad o el amor pueden enceguecernos, pero también es cierto que el desarrollo de la inteligencia es inseparable de la afectividad y ésta puede oscurecer el conocimiento pero a la vez, fortalecerlo. Puede creerse también que el conocimiento científico garantiza la detección de errores y milita contra la ilusión perceptiva. Pero ninguna teoría científica está inmunizada para siempre contra el error. La primera tarea de la educación según Morín, es enseñar un conocimiento capaz de criticar el propio conocimiento. La búsqueda de la verdad exige reflexibilidad, crítica y corrección de errores. Pero, además, necesitamos una cierta convivencialidad con nuestras ideas y con nuestros mitos. El primero objetivo de la educación del futuro será dar a los alumnos de la capacidad para detectar y subsanar los errores e ilusiones del conocimiento y, al mismo tiempo, enseñarles a convivir con sus ideas, sin ser destruidos por ellas.

2. Una educación que garantice el conocimiento pertinente. Ante el aluvión de informaciones es necesario discernir cuáles son las informaciones clave. Ante el número ingente de problemas es necesario diferenciar los que son problemas clave. Pero, ¿cómo seleccionar la información, los problemas y los significados pertinentes? Sin duda, desvelando el contexto, lo global, lo multidimencional y la interacción compleja. Como consecuencia, la educación debe promover una “inteligencia general” apta para referirse al contexto, a lo global, a lo multidimensional y a la interacción compleja de los elementos. Esta inteligencia general se construye a partir de los conocimientos existentes y de la crítica de los mismos.

3. Enseñar la condición humana. Una aventura común ha embarcado a todos los humanos de nuestra era. Todos ellos deben reconocerse en su humanidad común y, al mismo tiempo, reconocer la diversidad cultural inherente a todo lo humano. Conocer el ser humano es situarlo en el universo y, simultáneamente, separarlo de él. Al igual que cualquier otro conocimiento, el del ser humano también debe ser contextualizado: “quienes somos” es una cuestión inseparable de “donde estamos”, “de donde venimos” y “a donde vamos”.Lo humano es y se desarrolla en bucles: a) cerebro – mente- cultura; b) razón- afecto – impulso; c) individuo-sociedad-especie. Todo desarrollo verdaderamente humano significa comprender al hombre como conjunto de todos estos bucles y a la humanidad como una y diversa. En este sentido, la unidad y la diversidad son dos perspectivas inseparables fundantes de la educación. La cultura en general no existe sino a través de las culturas. La educación deberá mostrar el destino individual, social, global de todos los humanos y nuestro arraigamiento como ciudadanos de la tierra.

4. Enseñar la identidad terrenal. La historia humana comenzó con una dispersión de todos los humanos hacia regiones que permanecieron durante milenios aisladas, produciendo una enorme diversidad de lenguas, religiones y culturas. En los tiempos modernos se ha producido la revolución tecnológica que permite volver a relacionar estas culturas, volver a unir lo disperso. Es necesario introducir en la educación una noción mundial más poderosa que el desarrollo económico: el desarrollo intelectual, afectivo y moral a escala terrestre.

5. Enfrentar las incertidumbres. Todas las sociedades creen que la perpetuación de sus modelos se producirá en forma natural. Los siglos pasados siempre creyeron que el futuro se conformaría de acuerdo con sus creencias e instituciones. La educación debe hacer suyo el principio de incertidumbre, tan válido para la evolución social como la formulación del mismo por Heisenberg para la Física. Pero la incertidumbre no versa solo sobre el futuro. Existe también la incertidumbre sobre la validez del conocimiento. Y existe, sobre todo, la incertidumbre derivada de nuestras propias decisiones. Una vez que tomamos una decisión, empieza a funcionar el concepto ecología de la acción, es decir, se desencadena una serie de acciones y reacciones que afectan al sistema global y que no podemos predecir. Nos hemos educado aceptablemente bien en un sistema de certezas, pero nuestra educación para la incertidumbre es deficiente.

6. Enseñar la comprensión. La comprensión se ha tornado una necesidad crucial para los humanos. Por eso la educación tiene que abordarla de manera directa y en los dos sentidos: a) la comprensión interpersonal e intergrupal y b) la comprensión a escala planetaria. Morín constató que comunicación no implica comprensión. Esta última siempre está amenazada por la incomprensión de los códigos éticos de los demás, de sus ritos y costumbres, de sus opciones políticas. A veces confrontamos cosmovisiones incompatibles. Los grandes enemigos de la comprensión son el egoísmo, el etnocentrismo y el sociocentrismo. Enseñar la comprensión significa enseñar a no reducir el ser humano a una o varias de sus cualidades que son múltiples y complejas. Por ejemplo, impide la comprensión marcar a determinados grupos solo con una etiqueta: sucios, ladrones, intolerables. Positivamente, Morín ve las posibilidades de mejorar la comprensión mediante: a). la apertura empática hacia los demás y b) la tolerancia hacia las ideas y formas diferentes, mientras no atenten a la dignidad humana.

7. La ética del género humano. En el bucle individuo-sociedad surge el deber ético de enseñar la democracia. Ésta implica consensos y aceptación de reglas democráticas. Pero también necesita diversidades y antagonismos. El contenido ético de la democracia afecta a todos esos niveles. El respecto a la diversidad significa que la democracia no se identifica con la dictadura de la mayoría. En el bucle individuo-especie Morín fundamenta la necesidad de enseñar la ciudadanía terrestre. La humanidad dejó de ser abstracta y lejana para convertirse en algo concreto y cercano con interacciones y compromisos a escala terrestre.

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA

DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA - Vigésima segunda edición

Presentación

Las lenguas cambian de continuo, y lo hacen de modo especial en su componente léxico. Por ello los diccionarios nunca están terminados: son una obra viva que se esfuerza en reflejar la evolución registrando nuevas formas y atendiendo a las mutaciones de significado.
Especial cuidado ha de poner en ello el Diccionario académico al que se otorga un valor normativo en todo el mundo de habla española. La Real Academia Española y las veintiuna Academias que con ella integran la
Asociación de Academias de la Lengua Española trabajan mancomunadamente al servicio de la unidad del idioma tratando de mejorar y actualizar un diccionario de carácter panhispánico. Cuanto aparece en el DRAE es fruto de ese estudio y de la aprobación colegiada.
Hasta hace poco tiempo la edición en forma de libro constituía la única posibilidad de fijación y transmisión. Los recursos electrónicos de que hoy disponemos hacen posible un modo diferente de actuación. El Diccionario académico es actualmente una base informática de datos, lo que permite un mejor control de su contenido, proporciona mayor facilidad de revisión y, sobre todo, hace compatibles diferentes fases del trabajo sin las servidumbres exigidas por la edición impresa. De ahí el compromiso adquirido de ir haciendo públicas con periodicidad semestral las adiciones, supresiones y enmiendas que la Real Academia Española y sus Academias asociadas vayan aprobando.
De este modo los hispanohablantes que accedan a nuestra página electrónica podrán disponer del documento que contiene el texto de la última edición en papel -en este caso, la vigésima segunda, de 2001- y, al tiempo, el conjunto de modificaciones aprobadas. Por ello, entre los varios modelos posibles de organización se ha elegido el que mantiene con toda claridad la separación entre los dos documentos. Los consultantes acceden inicialmente a la vigésima segunda edición y, en los casos en que se añada un nuevo registro o un artículo haya sido modificado, verán en la pantalla un aviso que les permitirá contemplar la nueva versión.
Lo que a partir de abril de 2005 ofrece la Real Academia Española es el conjunto de más de 12 000 modificaciones aprobadas desde el cierre de la edición anterior hasta junio de 2004. Han sido ya estudiadas por la Española otras que irán siendo aprobadas por todas las Academias e incorporadas cada seis meses a esta página. De este modo se podrá disponer de una información actualizada del trabajo académico y se facilitará el conocimiento de la evolución del español.
¿Qué novedades presenta la 22º edición?
El contenido de la vigésima segunda edición del Diccionario de la lengua española publicado por la Real Academia Española fue profundamente revisado durante los nueve años transcurridos desde que, en 1992, apareció la versión anterior. Esta revisión se basó en dos ideas principales:
· De una parte, la necesidad de mantener actualizado el cuerpo de la obra en cuanto a los términos en ella registrados, trabajo indispensable para que el repertorio académico pudiera mantener su función unificadora del español.
· Por otro lado, la acomodación, en lo posible, de todo ese contenido a la estructura fijada por la Nueva planta del Diccionario, un conjunto de normas que los académicos, reunidos en Pleno, aprobaron en junio de 1997.
En cuanto a la actualización de la nomenclatura de la obra, se amplió el número de voces registradas hasta superar las 87 000.
· Por vez primera, la Academia Española y las veintiuna Academias asociadas emplearon el Banco de datos del español, que contaba entonces con más de 270 millones de registros léxicos, para esta actualización. Se añadieron más de 10 000 artículos nuevos; las acepciones aumentaron en más de 24 000 y las formas complejas (locuciones, frases, expresiones, etc.) experimentaron un incremento de más de 3000.
· Hay 12 122 artículos que tienen una o más acepciones correspondientes a estas zonas (la edición anterior contenía 6141). 18 749 acepciones tienen una o más marcas correspondientes a América y Filipinas (en la edición anterior había 8120). Hay 28 171 marcas correspondientes a las zonas aludidas (la edición anterior contenía 12 494).
Si quiere ver una selección de estas novedades, utilice la ventana de búsquedas.
· El manejo del banco de datos, junto con las consultas dirigidas a los académicos correspondientes españoles e hispanoamericanos, permitió suprimir más de 6000 artículos correspondientes a variantes anticuadas o dialectalismos españoles y americanos caídos en desuso.
· Se revisaron, en grado mayor o menor, campos léxicos como los de las matemáticas, la física y la química, la biología, la informática, la medicina, el derecho, la economía, el comercio, la filosofía, la literatura, la lingüística, el teatro, la milicia, la religión y la liturgia, el montañismo, etc.
En total, por alguno de los motivos anteriores o a causa de la revisión general a continuación descrita, más de 55 000 artículos de la edición anterior fueron objeto de una o más enmiendas.
Estas y otras cifras se presentan con mayor detalle en otro lugar de esta página.
Además de otras muchas tareas menores, la revisión general del cuerpo del Diccionario incluyó los siguientes trabajos:
· Se revisó la correcta lematización de los artículos y la colocación adecuada, dentro de ellos, de las formas complejas.
· Se modificaron muchas etimologías y se uniformaron los paréntesis etimológicos, especialmente para regularizar el orden de los elementos contenidos en ellos.
El texto que se puede consultar en esta página electrónica corresponde a la 2. ª tirada de la 22. ª Edición.

LENGUAJE Y HABLA PERSONAL



Por: Dr.: Pedro Ortiz Cabanillas

En este libro llamdo''En Lenguaje y habla personal'' se plantea medularmente una redefinición de la diferencia entre lengua y habla, pues ambas “todavía carecen de una teoría unitaria que los explique”.
En otras palabras lo que se observa en la presente edición, es que el autor redefine la diferencia entre lengua y habla, lo cual permite desarrollar la categoría de información del sistema personal y del nivel psíquico. De igual manera, considera al sistema como subsistema de la conciencia, la cual almacena y procesa el conjunto de signos de una lengua. Ello permitirá lograr un nivel superior de comprensión del nivel consciente, de la formación de la personalidad y los estadios del habla y alcanzando a desarrollar un entendimiento integrador de los desórdenes.

LA IMPORTANCIA DEL ACTO DE LEER


A través de este trabajo exhibido en la apertura del Congreso Brasileño de lectura del año 1981, Paulo Freire se plantea expresar la importancia del acto de leer a partir del relato de su propia experiencia como lector al mismo tiempo que explicar los principios de su posición como pedagogo al respecto. El acto de leer no es para Freire el sólo desciframiento de la palabra escrita. Hay un primer momento en la vida en el que la lectura, aún no alfabetizada, es lectura de la realidad, de los signos que nos ofrece el mundo inmediato que nos rodea: el lenguaje de los mayores con su carga de cultura propia y heredada, la simbología, las señales, los ruidos que percibe el niño. Una lectura que a medida que se profundiza va quitando los miedos. Y es en ese ambiente, el de lo conocido, el de lo que ya le es posible leer, que el niño es introducido por sus mayores en el desciframiento de la palabra escrita. La escolaridad representará para él un segundo momento, una segunda lectura, la de la palabra-mundo. La escuela profundiza el conocimiento que trae, no representa una ruptura sino la continuidad natural de ese momento primero, de esa realidad conocida. Dice Freire: “El desciframiento de la palabra fluía naturalmente de la lectura del mundo particular. No era algo que se estuviera dando superpuesto a él”. Para Freire, la lectura se inicia con la curiosidad. Los textos son objetos a develar, de los que es posible aprender una significación profunda y personal que hará posible finalmente la memorización y la fijación sin ser éstas impuestas por el docente. Una lectura que comienza con el universo de lo conocido por los educandos, con aquellas palabras que son suyas y por ello significativas. Una lectura que se inicia con las palabras del estudiante y no con las que el maestro plantea. “...las palabras con que organizar el programa de alfabetización debían provenir del universo vocabular de los grupos populares diciendo su verdadero lenguaje, sus anhelos, inquietudes, sus reivindicaciones, sus sueños. Debían venir cargadas de la significación de su experiencia...” Para Paulo Freire será necesario superar la “visión mágica” de la palabra escrita asociada a la memorización, a la repetición, a la lectura voraz y mecánica, a la calidad relacionada con la cantidad y con la posibilidad de rendir cuentas de lo que se ha aprendido con la lectura. En la alfabetización de adultos de sectores populares que ha llevado adelante Freire, la lectura tiene la importancia de un acto creador, de un acto de conocimiento pero también de un acto político porque provee las herramientas para disentir, para cambiar el mundo. El educador ayuda, acompaña en ese proceso, pero es el educando el sujeto de ese proceso, quien debe poner en juego su creatividad, su responsabilidad y su conocimiento de mundo.
Finalmente, para el autor, leer y escribir se presenta en este marco como imposibles de separar porque ambos son actos creadores. Lectura y escritura de la palabra son precedidas por lectura y escritura del mundo, donde leerlo será descifrarlo y escribirlo será en realidad rescribirlo, es decir, transformarlo.

SAN MARCOS, UNIVERSIDAD DECANA DE AMÉRICA



Carlos Daniel Valcárcel. UNMSM. 2ª. ED. 2001.Capítulos I, II y III.

CAPÍTULO I: FUNDACIÓN DE LA UNIVERSIDAD DE LIMA (12 DE MAYO DE 1551)
La Universidad de San Marcos presenta un ininterrumpido proceso que comprende sus antecedentes, fundación y ratificación jurídicos.
Según los cronistas hispánicos, el Imperio Incaico tuvo una institución de cultura superior llamada el Yachaywaci, dueña de un papel similar al de la Universidad hispánica
Luego de la invasión hispánica hecha por Pizarro, tanto en Jauja y en Lima, escogió "sitio" para edificar la futura Universidad, iniciativa no concretada de inmediato debido por las incesantes guerras con los indios y por las ya alteraciones de traidores y guerras civiles.
La preparación de los estudios superiores estuvo a cargo de los dominicos, cuyo incremento determinaría que fray Tomás de San Martín, en Capítulo efectuado en el Convento del Cusco, solicite fundar Universidad en la Ciudad de los Reyes. Esta idea será apoyada por el Cabildo de Lima; nominó como procuradores de la Ciudad ante la Corona a dos de sus personajes más representativos: el eclesiástico dominico fray Tomás de San Martín y el capitán Jerónimo de Aliaga.
La gestión de los Procuradores, principalmente la de fray Tomás de San Martín, culminó de manera positiva al conceder el monarca la Real Cédula de fundación de la Universidad, documento firmado en la ciudad de Valladolid.
La Real Cédula de fundación estuvo dentro de una fuerte Arca "con tres llaves" en el Archivo de la Universidad de San Marcos hasta la segunda mitad del siglo XIX
En el Perú y España la Real Cédula de fundación de la Universidad de San Marcos ha sido publicada repetidas veces.
La Universidad se inauguró el día dos de enero de 1553, en la Sala Capitular del Convento del Rosario de la orden de los dominicos, con la concurrencia de la Real Audiencia Gobernadora.
Desde 1553 hasta 1571 los rectores fueron, a la vez, priores de la orden dominica. En este lapso fueron ingresando frailes de otras Órdenes, clérigos y laicos de profesiones distintas, particularmente juristas y médicos y maestros en Artes.
En el Archivo Central de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos existen dos manuscritos la cual es la copia limeña de 1574 y la otra, sin fecha, redactada sobre el reverso de un pergamino. Sin embargo, hay un testimonio en el Archivo General de Indias.

CAPÍTULO II: FUNACIÓN DE LA UNIVERSIDAD DE MÉXICO DE (21 DE SETIEMBRE DE 1551)
El capítulo menciona que el 21 de setiembre de 1551 es fundada otra gran universidad en América y por si fuera poco en una de las dos capitales que tuvieron los dos virreinatos españoles, México.
Aquí se hace referencia que esta universidad está documentada y comprobada por los mismos españoles para que no haya reclamo o discusión alguna.
También se menciona que fue fundada con el nombre de San Pablo, ya que la universidad fue inaugurada el mismo día que fue celebrado este patrón.
Fue establecido que la universidad iba a gozar de los mismos derechos y privilegios tan igual como lo hacían las universidades de España.

CAPÍTULO III: PRECEDENTE JURÍDICO
Se halla una diferencia evidente entre la legislación del siglo XVI y las normas vigentes en época anterior con respecto a la creación de Universidades, la ley establecía dos clases de instituciones de cultura superior la cual era Estudio General (Universidad) en donde se enseñaban todas las Artes y las Ciencias, y el otro era Estudio Particular ("Colegio de estudios superiores"), plantel de educación restringida, ubicado por lo común en una población de menor categoría.
Esta situación legal fue modificada durante la primera mitad del siglo XVI, con ocasión de firmarse el Real Patronato o Patronazgo, acuerdo entre el Rey y el Papa para propiciar un constante auxilio mutuo de las supremas potestades civil y eclesiástica y su correspondiente reconocimiento jurisdiccional de soberanía.
Por otra parte, gracias a la firme política regalista del emperador Carlos V. La Universidad pasaba por dos etapas reglamentarias: Se iniciaba como Real y continuaba como Pontificia. La Universidad Real se establecía mediante una Real Cédula, logrando desde este momento la categoría de pública y nacional; y como Pontificia, se le daba un valor académico internacional; pudiendo sus graduados enseñar en cualquier Universidad.

CONFERENCIA DADA POR SIGFREDO CHIROQUE


La conferencia dada en el auditorio de la facultad de Educación trata sobre los principales cambios que atraviesa la educación peruana.
Se habla que la idea de ‘‘Educación clásica’’ ha ido cambiando con el transcurrir del tiempo, pues siempre el concepto de la palabra ‘‘educación’’ implicaba el acto de enseñar y brindar un nuevo aprendizaje. Sigfredo Chiroque sostiene que estos cambios en la educación peruana se inician en los años 90 con el nuevo modelo neoliberal de la educación y que desde allí se ha tratado de ajustar a la educación a ese nuevo modelo. Este modelo enfoca más al valor de uso, ya que ahora sólo se enseña con el fin de conseguir un empleo y ganar un salario .Un ejemplo claro de ello, sería decir que hay 35 000 maestros estudiando maestría. Ello comprobaría que cada vez más profesores buscan avanzar y poseer más valor agregado con el único fin de llenar sus datos y grados de estudios para mostrarlos como requisitos al momento de conseguir un trabajo y que no estudian con el fin de mejorar su nivel de conocimiento o el grado de enseñanza.
También se habló de otro tema que está relacionado al primer punto explicado, el cual habla de las posibles decisiones de los alumnos que culminan sus estudios académicos y se hablaron de ciertos datos respecto a ello. Como estadística nacional del año 2008 se tuvo que 405 512 alumnos egresaron del colegio. También se observó que 427 501 alumnos terminaron el 5º año de secundaria en el 2009 de los cuales sólo 217 000 ingresaron a la universidad. Finalmente se obtuvo en el año 2010 que de 450 000 alumnos que cursan el 5º año de secundaria, el 70% le gustaría seguir estudios superiores. Todas estas estadísticas reflejan claramente que existe un alto volumen en cuanto al valor de uso y ya no en el valor de cambio. En otras palabras se dice que ahora uno debe estudiar para luego trabajar. Es por ello, que no se habla ahora de un trabajo social (ni en sociedad, ni por la sociedad), sino de un trabajo individual.
Luego de ello, se mencionó que desde el 2003 se inicia un declive de estudiantes que prefieran seguir el Magisterio. Esta situación se agrava aún más en el 2007, ya que hay una caída más grave que la mencionada. Pero la pregunta es ¿por qué la gente ya no quiere estudiar Educación?
Una de las primeros motivos sería el saber que en el 2009 se señalaron 135 000 profesores con título que estaban desocupados. En adición a ello, los últimos 10 años el sector privado (educación básica) se ha multiplicado por 10 veces, es decir, que los profesores desocupados hacen sus propios colegios cada vez más y más.
Otro motivo sería que de acuerdo a la INEI la canasta familiar comprende 2 230 soles mensualmente. Tañendo como sueldo cada maestro 1087 soles. Lo que nos lleva a concluir que el sueldo de un maestro no cubre con los gastos que se hacen por un mes.
Un motivo más sería el gran desprestigio a la carrera, ya que ello comenzó hace unos 5 años aproximadamente. Se solía decir que la crisis de la educación es debida por la mala calidad de maestros. Además que la última ley que se dio fue la de que cualquiera no puede ser maestro, sino primero debe ser colegiado para luego ejercer la docencia.
Finalizando la conferencia, se mencionó que se intenta ayudar a la educación para acoplar un nuevo modelo; sin embargo, ésta está aún muy lejos de ser lograda. Se dijo que se espera retornar como en los años de 1960 y 1970, la línea de plantar una ideología (socialismo humano), tal como lo hicieron Salazar Bondi, Walter Peñaloza y Raúl Gonzales.
Esto era debido por el cambio radical que tomó la educación desde los años 90, ya que desde allí se ha convertido a la educación como un pensamiento liberal y antisocialista.La educación lleva el pensamiento de la globalización y la educación ahora es un negocio. Actualmente se han creado negocios a puertas abiertas a partir de allí, pues se tiene registrado más de 100 universidades en el Perú, siendo únicos en el mundo.

UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS FACULTAD DE EDUCAIÓN CONSEJO DE FACULTAD


COMUNICADO

El presente comunicado es para responder a la Ley Nº2950 que dice que cualquier profesional puede ejercer la docencia sin formación pedagógica.
Según las autoridades del poder político afirman, equivocadamente, que sólo basta el saber de una materia para poder enseñarla, sin embargo, ello no es cierto, ya que una cosa es dominar una materia y otra muy distinta es enseñarla.
Esto explica que el maestro recibe los acontecimientos ya hechos y su misión es la de transformarlo didácticamente para un mejor entendimiento del alumno.
Lo mencionado implica que el maestro a una materia la cual es difícil convertirla en una materia fácil para el alumno. Sin embargo, ello no es tan sencillo que digamos. Un claro ejemplo lo da San Agustín al decir ‘’yo sé lo que es el tiempo, pero cuando me preguntan por él, ya no lo sé’’, que en términos de un pedagogo significa ‘’el explicar a otro acerca de que es el tiempo’’.
Se menciona que la función de un docente es producir un aprendizaje y además que aquél debe ser uno crítico y creador.
Un ejemplo vendría a ser Einstein que al publicar su Teoría de la Relatividad necesitó cerca de 300 páginas de su libro para explicarlo y ni aún así pudo ser claro, ya que muy pocos lo entendían. Paralelo a ello, se destaca a Óscar Miro Quesada de la Guerra, quien divulgó con gran didáctica, la Teoría de la Relatividad en unas páginas del Comercio. Ello explica una extraordinaria claridad para ‘’llegar’’ pedagógicamente al lector.
Si se sabe una materia es muy bueno, pero para enseñarla se necesita complementarla con una formación pedagógica, lo cual se hace en nuestra Facultad.
Además, se debe recalcar que un docente no es cualquier informador o transmisor de conocimientos, sino un formador integral de personas, es decir, dando valores morales y buscar el bien.
Quedando claro que lo ya mencionado no significa establecer un didacticismo, ello quiere decir que se necesita el dominio didáctico para enseñarla.
Finalmente, se hace un llamado a las autoridades políticas de corregir la ley, exigiendo que profesionales de otras carreras obtengan una preparación pedagógica si desean ejercer la docencia.

LECTURA DE LA LEY N° 29510



Artículo 1.- Objeto de la Ley

Establécese la no exigencia del requisito de colegiación, normado en la Ley núm. 25231, Ley que crea el Colegio Profesional de Profesores del Perú, a los profesionales titulados en educación, que ejercen la docencia en áreas afines a su especialidad en las instituciones educativas públicas y privadas y de alternancia en zonas rurales, conforme a lo establecido en el artículo 58 de la Ley núm. 28044, Ley General de Educación.

Artículo 2,- Régimen especial
Reconócese un régimen especial para el ejercicio de la docencia en el sector privado, en forma temporal, a los profesionales universitarios extranjeros exceptuándolos del requisito de colegiación, establecido en la Ley núm. 25231, Ley que crea el Colegio Profesional de Profesores del Perú, y promuévese el intercambio y transferencia de conocimientos y técnicas pedagógicas de profesionales del exterior a favor de las instituciones educativas del país. Los títulos de os profesionales extranjeros se revalidan conforme a la ley de la materia.

Artículo 3.-Requisitos
Los profesionales universitarios extranjeros que temporalmente presten servicios de enseñanza en la educación básica del sector privado deben cumplir con los siguientes requisitos:
a) Que el título profesional o el grado académico que ostenten les permita ejercer la docencia en su país de origen.
b) Que el centro educativo en el cual presten servicios asuma la responsabilidad de su idoneidad profesional y moral.

Artículo 4.-Virgen de la norma
La presente norma entra en vigencia el día siguiente de su publicación en el Diario Oficial El Peruano.

LA ODISEA DE LA ESPECIE


El video habla acerca del origen del hombre, debido a que explica el proceso de transformaciones que se dio en los Australopitecos para formar la especie humana que perdura hasta hoy en día.
Los evolucionistas para sustentar estos procesos de transformaciones se basan en una serie de restos fósiles que han sido clasificados en:
1. Los Australopitecos, quienes son los antecesores más antiguos del hombre. Entre los principales representantes de los Australopitecos tenemos:
a. El hombre de Chad, descubierto al norte del país de Chad, allí se halló un cráneo casi completo; siendo así el antepasado más antiguo de los hombres.
b. El Australopitecos Ramidus.
c. La mujer de Lucy, quien se caracterizaba por ser bípedo (caminaba con dos pies).Fue considerada como la madre de la antigüedad.
Luego de los Australopitecos aparecerán los Homo Hábilis.

2. Homo Hábilis, éstos fueron los descendientes de los Australopitecos y se caracterizaban por elaborar sus instrumentos domésticos. Entre los principales representantes de los Homo Hábilis, tenemos:
a. El hombre de Kenia.
b. El hombre de Tanzania.
Pasado los Homo Hábilis aparecerán los Homo Erectus.

3. Homo Erectus, fueron descendientes del Homo Hábilis y se caracterizaban por ser bípedos, recolectores, cazadores, fabricantes de sus armas y por ser descubridores del fuego. Entre los principales representantes de los Homo Erectus, tenemos:
a. E hombre de Java, descubierto en Indonesia.
b. El hombre de Pekín, hallado en China.

4. Homo Sapiens, fueron descendientes del Homo Erectus y se caracterizaban por tener la capacidad de pensar, trabajar y expresarse.
5. Homo Sapiens Sapiens, fueron los descendientes del Homo Erectus y son los que continúan existiendo hasta hoy en día, según los evolucionistas, estos hombres se caracterizaban por realizar las mayores creaciones culturales y por poblar los continentes.
Uno de los representantes del Homo Sapiens Sapiens es el hombre de Cro-Magnon, el cual fue descubierto en Francia. Estos hombres fueron los primeros en realizar las pinturas rupestres, y según los seguidores de la evolución, estas personas vivieron en el paleolítico superior.

PALABRAS DE CAMBIO

El Dominical, Lima, domingo 18 de abril del 2010
LETRAS
Día del Idioma. El próximo 25 de abril se celebra el día del idioma español. A continuación un informe sobre las nuevas y viejas palabras de nuestra lengua.

Cada vez surgen nuevos términos y a la vez hay otros que caen en desuso con las transformaciones de nuestra sociedad, la cultura y con los grandes avances de la ciencia.
Se tiene como ejemplo USB, CD-ROM, poset, etc. Siendo éstas un grupo de nuevas palabras que serán admitidas por la RAE.
Asimismo, se aprecia que una gran cantidad de vocablos nuevos también provienen de inglés, lo que demuestra lo dúctil que es nuestro idioma.
Obviamente, la tecnología es otro gran sentidor de novedades: teléfono celular, realidad virtual, internet, digitalizador, modem, etc. Sin embargo, existen otras palabras cuyos usos comienzan a extinguirse.
Por otro lado, en este 23 de abril, se buscará revalorar el runa sinni, lo que simplemente se basa en reivindicar al quechua, como principal idioma, como una forma de expresar nuestra identidad y gran aparte al enriquecimiento del castellano.
Se habla que a través de la historia han existido muchas lenguas y se cree que surgieron luego de la construcción de la torre de babel y la posterior confusión de lenguas por Dios, según la biblia.
Hasta hoy en día se hablan y se hablaron muchos idiomas, ya que algunos han desaparecido y otros a punto de desaparecer; claro que otros idiomas se continúan hablando hoy en día .Se habla también que hay una lucha de dominante o conquistador por imponer su idioma como oficial en el país o región que sojuzga, esto se puede observar en los incas, quienes impusieron el quechua en todo su territorio como lengua oficial. Luego llegarían los españoles e impondrían el castellano; sin embargo, el quechua nunca pudo desaparecer. El mundo quechua nos ha enriquecido no solo en palabras, sino también con aportes a la culinaria y la música. El quechua ha estado en la cresta nuestra historia y sobre todo en sus momentos aciegos. Hablar de quechua es hablar de historia, de identidad y de cultura.

LA LECTURA COMO PROBLEMA



CAPÍTULO 1: Cómo vencer el miedo a leer
El tema central de este capítulo es porqué hay gente que no se atreve a leer. Esta idea implica que tienen dificultad para leer o no entienden nada de lo que leen. La posible respuesta aborda a un cambio en la mentalidad del hombre y no a una disminución de un óptimo entendimiento.
El texto menciona o compara a este problema con las personas que no quieren saltar a la parte más honda de una piscina, aun sabiendo nadar; la respuesta es el miedo al agua. Esto se debe a un posible trauma en el pasado, probablemente en la infancia o niñez. Estas ideas fueron realizadas por un estudio del pedagogo Benjamín Spoc.
Retomando nuestro tema central, algunos pedagogos plantearon como respuesta el ver la televisión, ya que luego de verla las personas tenían dificultad al leer o prestar atención a ello; no entendiendo así nada de lo que leían. Sin embargo, esta idea fue descartada ya que este problema se había iniciado antes de la creación de la televisión. Luego de ello se pudo comprobar que para personas lectoras y a los ‘‘lecturofóbicos’’ no había deficiencia mental o en el coeficiente intelectual.
Se menciona que al escuchar algo y uno luego lo repite, se estaría aplicando este método para un mejor entendimiento de lo que se escuchó antes y que no es debido a una falta de atención o deficiencia comprensiva. Esto se aprecia en cualquier tipo de nivel intelectual.
Pero aun la respuesta no queda claramente respondida. ¿Por qué no se supera la fobia a leer? Una respuesta inmediata sería debido a los malos métodos de lectura que los chicos de ahora reciben, pues a comparación de los tiempos del autor, sólo los maestros mandaban a leer y releer hasta memorizar y eran lecturas que no dejaban respuestas claras, ya que solo se aplicaba la lectura y no se iba más allá de lo que las preguntas de comprensión pedían. Por lo tanto, los chicos quedaban con preguntas en el aire; habiendo así más preguntas que respuestas concretas. En adición a ello, muchos maestros castigaban a sus alumnos por no cumplir sus lecturas y los alumnos podían soportar esos castigos, pero los chicos de ahora no pueden aceptar estos castigos.
Este problema envuelve también al cine y la televisión, ya que antes que existan estas cosas los muchachos llegaban a las aulas sin nada en la mente, entonces podían concentrarse más en sus lecturas y comprenderlas. En cambio, los chicos de hoy toman sus pensamientos y experiencias a partir de lo vivido por el cine y la televisión; sería más de difícil de concentrarse e introducirse en la lectura. Se habla que estos sentimientos y experiencias son difíciles de borrar al momento de leer. Se plantea que una posible solución a esto, sería aprovechar esas experiencias y sentimientos de una manera crítica, sin embargo esta idea aún no es aplicada.
Como punto final la lectura nos deja con una interrogante: si preferimos la televisión y al cine o a la educación que se vale del texto y una enseñanza tradicional.


CAPÍTULO 2: Lo que va de ayer a hoy
En esta lectura nos nombran 8 catecismos de la lectura entre buenos, regulares y malos.
1. Se debe leer despacio y cuidadosamente, sin saltearnos ni una oración ni dejar palabras sin leer. Además de lograr entender cada palabra, de otro modo se debe buscar en el diccionario.
2. Si se sabe que no hay tiempo necesario para leer toda la lectura pedida, no lo haga. Pues no existe la lectura veloz y no debe creer en los cursos de ‘‘lectura veloz’’ ya que es puro mercado.
3. Para un mejor entendimiento, debe asegurarse de tener los conceptos previos al tema de la lectura y así tomará nota de lo captado. De otra forma habrá una tremenda confusión.
4. Debe leer detenidamente hasta el final y dejar seguir el punto de vista del autor, y las críticas personales vendrán luego.
5. Trate de seguir paso a paso el entendimiento de cada párrafo de la lectura, si logró entender la idea del primero, no adivine las futuras ideas de los demás párrafos.
6. No permita que parte de las lecturas lo hagan recordar experiencias vividas. Estas comparaciones le harán perder la idea principal del texto.
7. El leer no implica pensar en equipo, sino se hace por uno mismo. Son cosas muy distintas y en algunos casos no van juntos.
8. El leer no significa diversión, ya que su misión principal es la de difundir, informar o dar a conocer cultura para nuestro progreso o para nuestro trabajo.
Luego de los puntos tratados, se da una lectura en la cual la maestra y los alumnos leen en voz alta y comprueban que en algunos casos no se cumplen los catecismos mencionados. La lectura es acerca Subienkon, un cazador de pieles, quien con un puñado de hombres quisieron llegar a un río en Alaska, mas este hombre fue atrapado por esquimales. Todos los hombres de Subienkon fueron torturados por Mukamuk, quien era el líder de los esquimales. Todos a excepción de un hombre quien era Pubenkon, ya que él logró escapar de las torturas de Mukamuk tras una muy buena jugada que le hizo a toda su tribu.
Luego de esta lectura se observan las respuestas a los principios dados al inicio de la lectura.
1. Se considera sí y a la vez no porque es bueno dejar en el aire palabras o frases sueltas sin entender, pero no es necesario ir al diccionario por su definición, en este caso los alumnos van a una enciclopedia donde leen, recuerdan o confirman las palabras.
2. Es correcto afirmar que no se debe empezar con la lectura, si se sabe que no se podría concluir en el tiempo que sólo uno dispone.
3. No se debe guardar la extra información que se pudiera tener del tema, sino se debe sacar a relucir e intentar asociarla con la nueva información que se recibe.
4. No es bueno hacerlo en gran manera, pues se habla que podemos manejar ideas o dar críticas, pero es preferido hacerlo a final de la lectura.
5. No se debe detener en adivinar lo que podría seguir en las siguientes palabras o párrafos. La lectura consiste en eso, formula preguntas o hipótesis en la predicción y serán respondidas con la comprensión de la lectura.
6. No se tiene que evitar las asociaciones a recordar experiencias que tengan que ver con la lectura, pues en la mente es inevitable olvidarlas, pero trate de hacerlo sin mucha frecuencia, solo de una forma casi moderada.
7. No es cierto que es malo leer en equipo y que todos den sus ideas en base a la lectura. En vez de ello, se aprovecha mucho, claro que respetando las ideas o críticas de cada uno.
8. No es cierto, las lecturas que producen gusto y placer no son necesariamente las formales o siempre cultas.